Cuidar de la iluminación, prestar especial atención a los electrodomésticos y encontrar el equilibrio entre repisas abiertas y cerradas son máximas que debes seguir en tu cocina.
La cocina es un espacio íntimo que en teoría, siempre debe de lucir impoluto y estar lleno de iluminación. Estas son las reglas que debes seguir para evitar caer en los errores más comunes al momento de decorar tu cocina y amplio, agradable y sobre todo, que despierte los sentidos y este siempre presto para la convivencia:
Lucir ajena a tu decoración
Se trata de un problema más común de lo que crees, pues la cocina suele ser uno de los espacios que menos se prestan para la creatividad debido a los requerimientos técnicos de sus instalaciones, como la ubicación de tomas de agua, gas y extractores. Si tu cocina tiene un estilo completamente distinto al resto de tu casa, empieza por cambiar lo más sencillo, como bancos o lámparas. Agrega pequeños detalles que te ayuden a coordinarla con la decoración del resto de tu hogar.
Tener una decoración en exceso
Una máxima a tener en cuenta permanentemente cuando se trata del diseño de tu cocina es que siempre debe perseguir la funcionalidad ante todo. De nada servirá tener un frutero o un jarrón en el centro del desayunador si debes moverlos cada vez que te sientas a la mesa, o un set de condimenteros que te impiden poner los utensilios más usados cerca de la estufa.
Colocar utensilios en el nivel equivocado
Los sartenes, platos, vasos, refractarios, bowls y el resto de tus utensilios de cocina deben acomodarse por proximidad según el uso que les das. Colocar en lo más alto de la alacena pinzas, tenedores y platos que usas comúnmente sólo te quitará tiempo y dificultará la agilidad en la cocina. Aquello que usas menos de una vez al mes puede ocupar los espacios más altos e inaccesibles, mientras que el resto de accesorios debería estar a la altura de tu vista o de tus manos.
Decorar muy cerca del fuego
Aunque hagas hasta lo imposible porque no pase, se trata de un imponderable cuando se cocina: las salpicaduras mancharán todo lo que esté alrededor del fuego. Aunque podría sonar evidente, evita sobremanera la decoración más cercana a la estufa, mucho más cuando es flamable.
Los aparatos electrónicos no están en armonía
Si tu cocina es blanca, el microondas negro, la cafetera tiene un estilo vintage y tu vajilla luce minimalista, la cocina perderá su personalidad. Elige con anticipación el color y estilo de tus electrodomésticos y toma en cuenta que no pueden lucir más que el diseño de tu cocina. Un accesorio rojo en un fondo blanco robará las miradas hacia lo menos atractivo de este espacio.
Tener poca iluminación
La cocina debe ser uno de los sitios mejor iluminados d e tu hogar, especialmente durante las primeras horas del día. Cuando se marcha el sol, la luz artificial deberá ser lo suficientemente intensa y natural para que puedas percibir el color y la textura de los alimentos. Este no es un espacio para probar con iluminación alternativa, así que decántate por tonos cálidos y naturales.
Separarla del resto del hogar
Las puertas que separan definitivamente la cocina del resto de los espacios están bien para un restaurante, pero no deberían ser parte de tu hogar. Se trata de un lugar íntimo, de preparación de alimentos y su consumo más informal y por lo tanto, el contacto con el comedor debe ser estrecho, pero no invadir el espacio de ninguno de los dos.
Elegir demasiados (o muy pocos) cajones
El tamaño de la alacena y el resto de cajones para almacenar utensilios de cocina debe ser equitativo al de tu espacio y el número de personas que lo habitan, de forma que no debes caer en el error de tener un sinfín de cajones y muebles vacíos, ni tener tantos que hace falta espacio para acomodarlos.
Fuente: AD
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