Un diseño creativo, dinámico y alegre es la mejor manera de definir el nuevo corporativo de One Work Place en Italia.
El diseño de oficinas en la actualidad ha dejado de ser aburrido e incómodo. Hoy en día, los arquitectos se preocupan por crear espacios amplios, confortables, y con excelente iluminación y ventilación natural, con el fin de que los empleados tengan las mejores condiciones laborales durante su jornada, se sientan identificados con la empresa e incremente su productividad.
Un ejemplo de ello lo encontramos en el más reciente trabajo de la firma estadounidense Design Blitz, ubicado en la periferia de Santa Clara, California, y realizado para One Work Place, una compañía familiar ubicada en Módena, Italia, dedicada al diseño y a la fabricación de mobiliario. Ésta no sólo necesitaba un espacio de trabajo, también un showroom para mostrar sus productos y nuevas propuestas al cliente.
El resultado es un desarrollo corporativo de 10 mil 660 metros cuadrados, que incluye cuatro áreas principales en las que se divide el programa arquitectónico: oficinas, salas de exhibición, almacén y estacionamiento.
La estrategia principal del proyecto fue utilizar en todos sus espacios interiores muebles concebidos por One Work Place, convirtiéndose en el mejor recurso de promoción y venta. Además, mediante esta obra el despacho mostró su compromiso con el medio ambiente y la sociedad, debido a que logró realizar una rehabilitación arquitectónica y urbana para la ciudad, gracias a que reutilizó gran parte del edificio preexistente, en lugar de demolerlo.
Y es que el diseño sustentable es parte importante del quehacer de estos proyectistas, quienes piensan que, “la sustentabilidad va más allá de lo verde, para nosotros significa ser adaptables y reutilizar edificios, materiales e incluso buenas ideas”, mencionó Seth Hanley, director creativo de Design Blitz.
Al tratarse de una corporación de origen italiano, el concepto del proyecto fue basado en generar un segundo hogar para los trabajadores, lo que se obtuvo después de analizar sus necesidades y valores. Por esta razón, los propietarios de la empresa solicitaron a los arquitectos que los ambientes interiores fueran alegres, a través de colores brillantes, accesorios y mobiliario lúdicos, espacios bien iluminados y cómodos. Un ejemplo de ello es la cafetería, la cual se convirtió en una de las estancias más divertidas y cálidas de la compañía, pues en ella se reúnen para convivir de manera informal tanto dependientes como clientes.
Las oficinas se encuentran en el centro del edificio, y la sala de juntas se colocó en medio de ellas sobre una plataforma elevada, la cual representa la figura y el movimiento de un boomerang, objeto que tiene un gran significado para ellos: el retorno por convicción de los empleados y, sobre todo, de los compradores. A su vez, se eliminó el mobiliario del equipo de ventas permitiendo que pueda deambular libremente por el inmueble y atender a sus clientes en donde ellos prefieran.
Finalmente, el diseño exterior de la fachada es abierto y con escaparates a la vista de los consumidores. Lo cual deja a un lado la idea tradicional de una oficina privada o cerrada, y logra con éxito reinventar la forma de concebir la forma de trabajar.
Fuente: AD
