Diseño Interior

Una transformación luminosa: Casa vintage en el corazón de Zaragoza

Sumergiéndonos en el encanto de la renovación arquitectónica, nos adentramos en el relato de la casa vintage que ha experimentado una metamorfosis impresionante. Con un diseño impregnado de toques de color pastel, esta residencia de 200 metros cuadrados, ubicada en el corazón de Zaragoza, se presenta como un sueño de luz, elegancia y comodidad.

La conexión entre la interiorista Patricia Lizalde y la propietaria de esta joya vintage fue instantánea, marcando el inicio de una colaboración fructífera. La vivienda, anteriormente anclada en la década de los noventa, revelaba una estructura compartimentada y oscura, con techos bajos y materiales obsoletos. Sin embargo, la visión compartida entre la cliente y la interiorista trajo consigo una transformación total.

La reforma incluyó la preservación del suelo de mármol emperador, que aporta carácter y reminiscencias aristocráticas al espacio. La estratégica ubicación en la esquina de una avenida principal inundó la propiedad con luz hasta entonces desaprovechada, influyendo en la zona de día de la casa.

La apuesta por una estética vintage elegante se refleja en la elección de muebles de formas redondeadas, principalmente de Rue Vintage. Además, la pasión de la familia por la lectura se tradujo en estanterías a medida de Muebles Lajusticia, fusionándose armoniosamente con las molduras de las paredes.

La cocina, previamente relegada a una zona oscura, experimentó una elevación significativa al abrirse a la sala, beneficiándose de la luz natural de los ventanales. La redistribución permitió la creación de una isla central con electrodomésticos y una acogedora zona de oficina. Las puertas correderas de madera y cristal añadieron un toque modernista, convirtiendo la cocina en el lugar ideal para recibir y socializar.

Otro logro destacado de la reforma fue la integración del baño en suite de la recámara principal. Lizalde, con visión y creatividad, optó por colocar puertas correderas de madera y cristal en la pared lateral, inundando el espacio con luz natural y ampliando el vestidor.

Un testimonio de la magia que puede surgir cuando la visión compartida entre el cliente y el interiorista, de esta manera podemos ver como un proyecto residencial se materializa. La mezcla audaz de estilos, la maximización de la luz y la atención meticulosa a los detalles convergen para crear un hogar que es verdaderamente único y acogedor.