El arquitecto Vincent Callebaut ha diseñado un parque de polinizadores para la Comisión Europea, un proyecto que busca un futuro mejor, en armonía con la naturaleza.
El arquitecto Vincent Callebaut firma el diseño del parque de polinizadores, un nuevo proyecto para la Comisión Europea que pretende proteger la naturaleza y los ecosistemas para detener el declive de polinizadores como las abejas o las mariposas, fomentar su producción y tomar conciencia sobre la disminución de sus poblaciones. Vincent se inspira en la silueta de una flor para el diseño de este parque , dándole forma orgánica y concibiendo el proyecto con un eje central con un ascensor de vidrio con vistas panorámicas que une los invernaderos botánicos para la producción agrícola.
Las zonas de cultivo y los invernaderos están diseñados con madera laminada y materiales de origen biológico reciclable y se dedicarán a la agricultura del futuro. Además, el parque integra molinos de viento para generar energía geotérmica que enfriará los invernaderos en verano y los calentará en invierno. El proyecto tiene como objetivo concienciar y educar a las personas a proteger la naturaleza, la fauna y la flora, ya que afecta directamente a la salud del ser humano. Así, Vincent demuestra la importancia de la arquitectura y el diseño para crear un futuro más sostenible, sobre todo mejorando la agricultura y la tecnología para vivir en armonía con la naturaleza.
Otros proyectos para salvar a los polinizadores
Viendo su tamaño, las abejas pueden parecer insignificantes en el mundo, pero su desaparición traería muchas consecuencias. La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) estima que casi el 90 por ciento de todas las especies de plantas con flores depende de polinizadores y Greenpeace ha calculado que el 75 por ciento de los alimentos que consumimos dependen de ellos. Teniendo esto en cuenta no es de extrañar que muchos diseñadores hayan desarrollado proyectos para salvar estos insectos. Incluso grandes compañías han puesto su grano de arena para asegurar su conservación. Space 10, el laboratorio creativo de Ikea, presentó en 2020 Bee Home, una página web de la que puedes descargarte planos para realizar tu propia colmena. En Suecia, Mc Donald's también ha iniciado un proyecto para ayudar, instalando en los tejados de algunos de sus restaurantes colmenas (con forma de minilocales de Mc Donald's) y plantando en las inmediaciones especies con floración adecuada para las abejas.
En Países Bajos, la diseñadora Matilde Boelhouwer ha creado el proyecto Insectology: Food for Buzz, una serie de flores artificiales que recogen el agua de la lluvia y sirven de alimento para los insectos de la ciudad. Según explica, estas flores podrían colocarse en edificios para que las abejas pudieran sobrevivir en entornos urbanos. Otro proyecto que pone la tecnología al servicio de la naturaleza es que desarrollado por los estudiantes del título Superior de Diseño de Producto del IED, Laura Cragnolini y Juan José Martínez. Se trata de un dron polinizador que contiene semillas para repoblar especies de los ecosistemas más dañados. Los colores turquesa, verde y amarillo de estas flores teledirigidas atraen a los insectos polinizadores que penetran en las membranas perforadas, recogen el polen y lo dispersan localmente.
Fuente: Elle Decor
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