Los tonos oscuros con toques dorados y la utilización de paredes de vidrio han creado en este piso unos espacios de marcada personalidad y sugerentes efectos ópticos.
Vidrio, madera y cemento y, sobre todo, las vistas sobre el mar. El leitmotiv de la reforma de este apartamento se basa en estas sencillas premisas principales. El estudio de diseño de interiores Boom Design reconfiguró los espacios de esta casa en Odessa (Ucrania) con la idea de sacarle el máximo partido a la planta de 86 metros cuadrados y la dejar que el protagonismo se lo llevaran las panorámicas de la costa que dejan los grandes muros ventana. Incluso las habitaciones tienen paredes de vidrio para poder disfrutar de las vistas. Los interioristas crearon una caja oscura en la que la optimización de los metros fue una constante, utilizando recursos como el techo negro. Según afirman, esto proporciona una experiencia espacial única, un efecto óptico al que ellos han llamado "efecto noche" y que, según el cual, dejas de percibirlo cuando llevas un rato en la casa, desaparece para sus habitantes y da la sensación de mucha más altura. Del mismo modo, las paredes paneladas –de oscuro– ocultan diferentes sistemas de almacenaje, incluida la cocina, que quedan prácticamente camuflados.
El espacio también se agiliza gracias al mobiliario, la gran mayoría diseñado a medida, como el programa de asientos del salón: un gran módulo acoge, por un lado, el sofá de la zona de estar y, por el otro, una bancada para la mesa de comedor. También creados específicamente para este proyecto encontramos los detalles en latón dorado, que crean un golpe de efecto sobre el conjunto oscuro, poniendo un toque de sofisticación y personalidad.
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