El loft aparece en la ciudad de Nueva York en 1950 a consecuencia de lo caro que resultaba el costo de vida de aquel entonces. En las las ciudades como Manhattan se empezaron a generar lugares que funcionaban como industrias o fabricas que quedaban abandonadas y que poco a poco iban siendo transformando en viviendas
El Arq. Diego Olivera nos explica que el loft es un espacio que implica amplitud sin paredes y sin elementos de cierre que permiten generar mayor luminosidad y con alturas regulares.
Además nos indica que la ausencia de tabiquerías nos permite obtener espacios con sensación de amplitud incluso cuando el metraje de estos sea reducido, aún más si se trabaja con elementos vidriados que permitan el ingreso de luz.
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