Saavedra Arquitectos presenta su último proyecto, Casa Oruç, una obra que redefine la integración de la arquitectura con la naturaleza. Ubicada en un terreno boscoso y montañoso de Mineral del Monte, Casa Oruç es un refugio que se mimetiza con el paisaje y ofrece un espacio de reunión y retiro para sus propietarios, Lore y Carlos.
El terreno, caracterizado por una pendiente pronunciada y rodeado de árboles y formaciones rocosas, planteó un desafío arquitectónico único. Con acceso por su punto más alto al este y su punto más bajo al sur, la casa se desplanta en una zona erosionada al norte, donde la vegetación es menos densa. Este entorno, donde la lluvia es tan constante como el sol, inspiró un diseño que dialoga con los elementos naturales, logrando que la casa se oculte entre los pinos y emerja como una estructura que parece flotar entre los árboles.
El acceso a Casa Oruç es una experiencia en sí misma. Desde el punto más alto del terreno, los visitantes cruzan un puente que lleva a una torre que envuelve la sala principal, con escaleras que serpentean a su alrededor. A lo largo del recorrido, los materiales cambian de concreto aparente negro a block de cemento estriado, reflejando la transición entre el exterior y el interior de la casa.
El interior de la casa, diseñado para recibir a muchos invitados, es un espacio abierto y multifuncional. Desde el comedor hasta la sala y la cocina, los ambientes se integran, permitiendo una interacción fluida entre los espacios. Una terraza al sur amplía estas posibilidades, mientras que la losa de concreto a dos aguas invertida, que parece flotar entre los árboles, conecta las habitaciones con la naturaleza circundante. En una de sus alas, un árbol atraviesa la estructura, simbolizando la unión de la arquitectura con el entorno.
Uno de los aspectos más sorprendentes de Casa Oruç es su capacidad para "volar" sobre el terreno, con una estructura que se eleva 7.5 metros sobre el bosque, capturando la luz que alcanza esa altura. Además, los techos invertidos recogen el agua de lluvia, que se canaliza como una cascada hacia una cisterna, subrayando el enfoque sostenible del proyecto.
Casa Oruç no solo es un refugio para Lore y Carlos, sino que también cuenta la historia de su crecimiento como familia, pues fue concebida inicialmente para dos personas, pero ahora acoge a tres, incluyendo a su fiel compañero, el perro Oruç.
Saavedra Arquitectos invita a descubrir Casa Oruç, una obra donde la arquitectura y la naturaleza se encuentran en perfecta armonía, creando un espacio que inspira y acoge.
Fotografía: Onnis Luque
© 2024 Dossier de Arquitectura, Todos los derechos reservados