El proyecto se concibió como una estructura de hormigón prefabricada y montada rápidamente in situ, lo que permitió que el coste de las unidades se mantuviera dentro de un valor de mercado razonable y que el proyecto demostrara que es posible tener grandes terrazas, sombrillas de vegetación y muchas otras tecnologías dentro de un mercado específico, lo que llevó la percepción de los posibles compradores a un nuevo estándar.
El departamento de diseño de interiores de Studio Saxe coordinó cada material, cada cocina, cada baño y cada espacio para que fueran coherentes con el tema arquitectónico de una arquitectura urbana tropical glamurosa que se sustentaba en un diseño bioclimático, por lo que la cohesión de los materiales y los colores en el interior y el exterior crea una armonía de un edificio que parece estar diseñado por personas de mente ligera.
El proyecto se dio mediante estrategias de diseño pasivo, como el control de la temperatura, que permite la ventilación cruzada en todo el apartamento, por lo que no hay pasillos entre las unidades. Las grandes terrazas protegen del sol abrasador en determinados momentos del día, y se combinan con sombrillas que también permiten que la luz se filtre y que se controle la temperatura. La zona común, situada en la segunda planta, tiene un huerto con plantas comestibles que los habitantes pueden ir a recoger para su uso personal.
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