De madera, tapizado, en pareja, curvo… los bancos son los asientos más apetecibles en los comedores en este momento.
“Donde comen dos, comen tres”, reza el dicho popular. Y nada mejor para hacerlo posible que colocar un banco en tu comedor, la forma más funcional y estilosa de sentar a más personas a tu mesa, sea del tamaño y la forma que sea. Además, lo puedes combinar a la perfección con otros muebles del comedor, como aparadores o la propia mesa. Todos tenemos en la memoria la imagen de los míticos restaurantes y cafés de tertulias con bancos corridos tapizados (sobre todo con un terciopelo rojo que aportaba un toque teatral) que aseguraban sobremesas confortables, deliciosamente interminables y en la mejor compañía.
Si decides colocar estos asientos en tu comedor (por favor, hazlo), tienes muchas opciones entre las que elegir, desde distribuirlo combinando un solo banco con varias sillas (puedes optar por un comedor con sillas diferentes) a enfrentar dos bancos iguales. También puedes mandar fabricar uno de obra con forma de ele o colocar un sofá de patas altas y con poco fondo o un banco sin respaldo (una gran elección si quieres un resultado más ligero para la vista). ¿Más opciones? Los bancos de madera son un clásico y combinarán con una decoración en madera en el comedor. Echa un vistazo a estos quince ejemplos prácticos que hemos descubierto en los últimos proyectos de decoradores e interioristas. Todos son hogares de familias reales, por lo que no tienes excusa para no intentarlo en tu propia casa.
La zona de office de esta cocina nos recuerda a los clásicos cafés: un banco corrido tapizado con capitoné, una mesa mesa con base de hierro y sobre de mármol blanco, alacenas, suelo de mosaico… Pero el potente amarillo del terciopelo hace que este look entre de lleno en el siglo XXI.
DE PARED A PARED
Aprovecha todo el largo de una pared para instalar un banco a medida. Junto con una mesa extensible es la mejor opción para crear un comedor que crece según las necesidades del momento. Coloca unas colchonetas cómodas y lo convertirás en un rincón perfecto para relajarte.
FRENTE A FRENTE
Dos mejor que uno. Y dos bancos en un comedor, enfrentados, suponen mucho espacio disponible en tu mesa.
DIFERENTES, PERO CONECTADOS
Si optas por dos bancos de estilos muy diferentes, busca un hilo que los conecte. En este salón, el banco con respaldo hecho a medida que recorre la pared se ha tapizado con los mismos tonos que tiene la alfombra antigua con la que se ha cubierto el otro banco.
DOS POR UNO
Nos encanta esta idea de Blanca Fabre: Aprovecha el largo de un banco para colocar dos mesas de comedor pequeñas. Son más manejables (y asequibles) que una grande y puedes juntarlas para crear una sola cuando lo necesites.
CUIDADO QUE VIENEN CURVAS
Este ventanal semicircular pedía un banco a medida que siguiera su forma a gritos. Así lo diseñaron los arquitectos Turull-Sörensen, colocando junto a él el comedor.
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