El estudio francés de diseño e interiorismo Dion & Arles se inspiró en la obra de los diseñadores italianos del siglo XX Carlo Mollino y Gio Ponti para el interior del restaurante londinense Il Gattopardo, en Mayfair.
Il Gattopardo, ubicado en el corazón de Mayfair, Londres, se ha concebido con la intención de honrar la esplendorosa era del diseño italiano de mediados del siglo en un ambiente acogedor. Este concepto se materializa a través de cinco áreas gastronómicas, según señala el estudio responsable.
El comedor principal y el bar de mariscos dan paso a un comedor interior y otro bar, que a su vez desvelan un exclusivo “salón” con capacidad para diez personas, donde los cómodos sillones tapizados y una gran chimenea con bajorrelieves en el techo son las características distintivas.
Este salón se caracteriza por sus asientos curvados de terciopelo y su imponente chimenea, que realza la atmósfera. Las mesas están adornadas con dibujos en tonos sepia creados por el artista Piero Fornasetti, que complementan los asientos en tonos ámbar apagado.
En el comedor principal, se ha optado por banquetas minimalistas y una disposición de mesas y sillas en grupos reducidos. El inconfundible estampado de leopardo se hace presente en alfombras, cojines y obras de arte, en tonalidades que van desde el ámbar hasta el azul.
Los espacios están adornados con una ecléctica mezcla de esculturas de formas libres, objetos, lámparas, marcos y coloridas alfombras, elementos que, según el estudio, reflejan la influencia del maestro del diseño italiano, el interiorista y arquitecto Gio Ponti.
El techo está cubierto con un tejido a rayas inspirado en los forros de las sastrerías italianas, mientras que los paneles de las paredes evocan el salpicadero de un antiguo cupé Fiat. En la esquina, la piedra italiana reviste la barra de mariscos.
El comedor privado, inspirado en el estilo ecléctico y variado del apartamento de Mollino, se ha diseñado con una alfombra de leopardo de la reconocida interiorista francesa Madeleine Castaing, creando una atmósfera de refugio secreto. Frescos clásicos en tonos sepia adornan la pared, situados sobre paneles de tela texturizada en azul marino. La suave iluminación se filtra a través de la tela que descansa entre las vigas del techo, imitando el resplandor de un atardecer. Una barra de ónice iluminada completa la cálida iluminación.
El diseño de los interiores de Il Gattopardo fue un proyecto muy deseado por el estudio, ya que les permitió trabajar en un estilo que los diseñadores adoran. Como puntos de referencia para el espacio, se mencionaron proyectos del interiorista David Hicks y películas del director Stanley Kubrick.
