La primera visita al sitio cambió todas las ideas preconcebidas acerca de qué forma debería tomar esta casa. Situada en una ladera elevada, mirando el río Ganges al doblar una curva, la energía desenfrenada del río se convirtió en la inspiración constante y la forma que la casa intenta reflejar.
El proyecto, una casa de vacaciones/retiro en la ruta Haridwar-Rishikesh, fue fácil de diseñar cuando trabajábamos con clientes que compartían una pasión por el diseño, quiénes también confiaron lo suficiente en nosotros como para embarcarse en este diseño radical.
Los requisitos de la casa eran simples: suites de tres dormitorios y suficientes espacios casuales e informales para descansar con familiares o amigos y empaparse del territorio virgen a su alrededor.
Conducir a lo largo de la extensa y serpenteante carretera que conduce a la casa (que no revela el espectáculo de la magnífica vista del río), lleva a la estructura entre dos muros de 12 pies de altura, fuertemente alineados y casi paralelos de mampostería de piedra (toda piedra utilizada para mampostería fue aleatoria, las paredes de la casa fueron extraídas localmente). Más allá de estas paredes hay una cancha cerrada con paredes en 3 lados.
Solo al entrar por las puertas de madera de teca uno comprende las amplias vistas del río. El gran espacio de entrada, junto con la cubierta exterior, funciona como una zona de descanso informal. También incluye un recinto de comedor con marco elíptico, de vidrio y teca. Cruzando un puente desde aquí, se pasa a través de un patio interno antes de descender a la sala de estar baja.
El dormitorio principal junto con su baño en suite (y patio con ducha al aire libre) se encuentra a un lado de la sala de estar. A través de un largo pasillo acristalado con una arboleda de bambú, se accede a las habitaciones y la sala de televisión del otro lado. Este corredor acristalado está contenido entre las habitaciones que dan al río en un lado. El muro de contención que sostiene el suelo con aristas oculta la presencia del spa al otro lado de los muros de la entrada. Una pequeña cancha garantiza suficiente luz natural, mientras ofrece total privacidad a sus usuarios.
De acuerdo con la ubicación y la forma de la casa, jugamos con materiales naturales y acabados interiores. Los techos a lo largo están en forma de hormigón terminado, como la mayoría de los muros de contención. Los muros internos restantes están en ladrillos pintados de blanco o en mampostería al azar.
El suelo en todas las áreas públicas y de circulación está hecho con piedra arenisca texturizada de color ocre, mientras que las habitaciones están acabadas en madera. Los baños también están revestidos con piedras locales y madera de teca. Se utilizó en toda la casa muebles de madera maciza de teca junto con muebles de lino y algodón.
