En el suburbio de City Beach, en Perth (Australia Occidental), el estudio de interiores Design Theory ha remodelado una casa cansada de los años sesenta manteniéndose fiel a una paleta de materiales naturales del diseño original.
La joven clienta quería una casa en la que pudiera recibir a sus amigos y vivir con sus perros en un hogar duradero, fácil de limpiar y a prueba de mascotas, con un plano reformado que diera cabida a tres dormitorios y dos cuartos de baño.
Por lo demás, según el estudio, la casa sólo necesitaba una restauración delicada y un toque ligero para ponerla al día, debido a su énfasis premonitorio en la luz natural, el aire fresco y la vida moderna y sin pretensiones.
La paleta de materiales es cálida y terrosa: ladrillo visto en tonos terracota, madera autóctona de Blackbutt y Forbo Marmoleum en los suelos.
En el salón hundido, las losetas de moqueta añaden un elemento de confort y un distintivo efecto visual cuadriculado.
El uso intensivo de madera y ladrillo en tonos intensos se equilibra con el blanco de las paredes pintadas, los marcos de las ventanas en forma de cuadrícula y la iluminación colgante baja.
En la cocina, los sutiles detalles de los armarios, como los tiradores anchos, añaden interés visual sin llamar excesivamente la atención, mientras que la cocina naranja aporta un toque retro.
El cliente adquirió varios muebles de época junto con la casa, que Design Theory quiso conservar y restaurar.
Como contrapunto a estos elementos de mediados de siglo, muebles contemporáneos de formas suavemente curvadas suavizan las rigurosas líneas de la arquitectura original y evitan que los interiores parezcan un pastiche de época.
También se restauraron y reintegraron piezas clave de ferretería, como los muebles originales de las puertas y las lámparas colgantes, “que aportan autenticidad a la nueva vida de la casa”, según el estudio.
