También conocidas como Tillandsias, las plantas de aire son peculiares por no necesitar tierra para vivir. Compartimos qué son y cómo cuidar estas plantas.
Las plantas de aire, cuyo nombre original es Tillandsias, se han vuelto populares en la decoración, pero, ¿qué son estas plantas y cómo cuidarlas? Las plantas aéres son muy peculiares, dado que no necesitan tierra para vivir. Por ello, son ideales para interiores y exteriores.
Dependiendo de su especie, estas plantas pueden crecer en macetas o sobre rocas y, según el Feng Shui, estas se vinculan con la prosperidad, la armonía y las buenas energías.
A continuación, compartimos qué son las plantas de aire y cómo cuidarlas en casa.
¿Qué son las plantas de aire?
Las plantas de aire, cuyo nombre original es Tillandsias, son un tipo de plantas muy peculiar, dado que no necesitan tierra para vivir. La mayoría de ellas crecen en las copas de los árboles para refugiarse del sol directo y conservar la humedad.
También, existen otras especies de plantas aéreas que crecen sujetas sobre rocas, cuyas raíces solo sirven como método de anclaje ya que no absorben ni nutrientes, ni humedad de la planta que la soporta.
Dado que las plantas de aire absorben todos los nutrientes que necesitan del aire que las rodea a través de los tricomas de sus hojas, son ideales para tener en interiores o exteriores.
Además, estas especies son purificadoras ya que, según el Feng Shui, las plantas de aire ayudan a depurar el ambiente, ya que se vinculan con la prosperidad, la armonía y las buenas energías.
¿Cuáles son las plantas de aire?
Existen más de 650 especies de plantas de aire, las cuales se clasifican de acuerdo a sus características. Sin embargo, las más comunes son:
Epífitas
Son aquellas plantas de aire cuyo desarrollo depende de otras plantas y arbustos. Estas especies crecen apoyadas sobre otras plantas, pero sin desarrollar actitudes parasitarias, por ejemplo: • Tillandsia ionantha • Clavel de aire • Tillandsia usneoides
Litófitas
Estas plantas aéreas pueden desarrollar sus raíces sobre piedras, madera o cemento, absorbiendo nutrientes de la humedad y desechos acumulados en su soporte, por ejemplo: • Billbergia nutans • Tillandsia Tectorum • Tillandsia cyanea
Verdes
Las plantas de aire verdes carecen de tricomas y se distinguen por el color verde intenso de sus hojas. Al no poseer tricomas, estas especies necesitan climas templados para su supervivencia, por ejemplo: • Epidendrum paniculatum • Vanilla planifolia • Tillandsia bulbosa
Grises
Este tipo de Tillandsias se distingue por el tono grisáceo de sus hojas, así como de sus tallos. Al poseer tricomas, estas especies son más resistentes, ya que pueden almacenar agua y humedad con mayor solvencia, por ejemplo: • Magnusiana • Tillandsia didisticha • Tillandsia gardneri
¿Cómo se riegan las plantas de aire?
Las plantas de aire necesitan una gran cantidad de humedad ambiental, por lo que es recomendable pulverizarlas de forma ocasional. Sin embargo, es importante retirar el exceso de agua, para evitar que sus hojas se pudran.
En verano, las pulverizaciones deben ser diario, mientras que en invierno, basta con hacerlo cada tres o cuatro días. Sin embargo, si las plantas de aire se encuentran en interior, es importante mantener la humedad, ya que esta suele ser menor dentro que fuera de casa.
Un buen consejo es observar el cambio en la coloración de las hojas, comparando el tono que adquiere cuando terminas de pulverizarla, ya que este indica si tu planta sufre de falta de humedad. También, que estas se arruguen es señal de deshidratación.
Otra forma de regar las Tillandsias es hidratarlas por inmersión, especialmente si se trata de grandes plantas. Para ello, puedes colocarlas dentro de un recipiente durante unos 20 ó 30 minutos para que absorban el agua necesaria, para después dejarlas escurrir, antes de volver a colocarlas en su lugar.
¿Qué otros cuidados necesitan las plantas de aire?
Además de la humedad, las plantas de aire necesitan de luz y ventilación. No obstante, se recomienda cultivarlas en áreas que no reciban luz solar directa por demasiado tiempo, es decir, máximo dos horas diarias.
Si la planta muestra un crecimiento lento será necesario trasladarla a un área más iluminada, sobre todo en invierno, ya que estas deben recibir abundante sol, dado que los rayos son de menor intensidad y frecuencia.
Las plantas de aire pueden conservarse sin problemas en macetas, objetos de madera o piedras. Sin embargo, en zonas frías se recomienda su cultivo en interiores, para protegerlas de las heladas. Estas pueden vivir perfectamente en casas, oficinas y apartamentos.
Fuente: AD
© 2024 Dossier de Arquitectura, Todos los derechos reservados