Construida desde cero, esta casa de 400 m², ubicada en el interior de la ciudad de São Paulo (Brasil), cuenta con 3 niveles: garaje en la parte inferior, área social en la planta baja y ala íntima en el piso superior. La propuesta fue brindar toda la comodidad y luminosidad de una casa de playa en la ciudad, utilizando materiales naturales como piedras, madera y ladrillos. El complejo de ocio es completo e incluye: barbacoa, columpio exterior y piscina con plataforma suspendida y spa. La altura del techo permite ofrecer una iluminación natural abundante, además de ventilación cruzada.
Los aspectos destacados de este proyecto son: la varanda gourmet - Muy agradable, esta área está integrada con los espacios internos de la casa y la piscina, pero también se puede aislar, simplemente cerrando las puertas correderas con una apertura de 9 metros. Siguiendo la paleta de materiales del área interna, la varanda gourmet tiene ladrillos en las paredes, presencia de madera en los muebles y también en la estructura de las vigas del techo en madera garapeira, la abundancia de luz natural y el verde de las plantas completan el estilo costero. Para la varanda gourmet, se creó un detalle especial: la escalera de acceso al piso superior se extiende un poco fuera de la casa, creando un nivel que permite una hermosa vista de la barbacoa para quienes recorren el lugar.
En cuanto al área de recreación - la piscina está inspirada en el renombrado arquitecto y paisajista brasileño Roberto Burle Marx, con líneas rectas y curvas, tanto en los pisos como en los diseños que forman el paisajismo, realmente reminiscente de un área de lago, donde no hay trazos lineales, convirtiéndola en un área de piscina moderna y agradable para relajarse y admirar. El pasillo suspendido tiene un piso que imita la madera, mientras que alrededor de la piscina el suelo está hecho de piedra natural São Tomé. El espacio también cuenta con un columpio fijado al cenador, donde también se encuentra el orquideario. Una curiosidad sobre el proyecto de la casa es que la piscina se construyó incluso antes del diseño de la residencia. Con la intención de asemejarse a un lago, el arquitecto también ejecutó el paisajismo circundante con formas orgánicas.
En cuanto a los elementos y paletas de colores utilizados en el proyecto, muchos elementos naturales como piedras y maderas, en un moodboard claro y detalles en freijó, están presentes. La casa tiene pocas paredes internas, lo que permite una sensación de mayor amplitud y continuidad sin ningún obstáculo visual.
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Fotografía: Guilherme Pucci
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