Las impresoras 3D han llegado para crear diseños con hormigón, plástico reciclado y ¡hasta con los restos de tu desayuno! Con estos diseños tan sofisticados, nadie adivinaría de qué están fabricados (ni cómo).
Hace unos años, imaginar una impresora 3D en casa parecía una idea sacada de las películas de ciencia ficción futuristas. Pero ese futuro llegó antes de lo que pensábamos provocando una auténtica revolución industrial. El listado de beneficios de la impresión 3D convence a cualquiera, ya que, en primer lugar, ha democratizado el diseño. Su accesibilidad y bajo coste ha impulsado a muchos diseñadores a investigar nuevas formas de crear.
La rapidez en crear ciertas piezas, frente a la producción mediante moldes o maquinaria específica para cada producto, hizo que las impresoras se convirtieran en la primera opción a la hora de dar forma a prototipos. Pero gracias a los grandes avances, la impresión 3D ha pasado a fabricar productos finales de alta calidad.
A pesar de que muchos diseños cuentan con el plástico como material principal de fabricación, esta innovadora forma de producir es una opción sostenible al no generar grandes residuos y utilizar solo el material necesario. Además, cada vez es más común introducir biomateriales que transforman los recursos de la naturaleza en productos de diseño ecológico. Reutilizando de una forma muy creativa los residuos que generamos, devolviéndolos a nuestros hogares en forma de muebles y decoración sofisticados e innovadores.
DE BASURA A TESORO
Una forma más inteligente de gestionar los residuos de la cadena alimentaria ha llegado en forma de lámpara, bajo el sello italiano de Krill Design. Esta empresa concienciada con el medio ambiente se ha propuesto reutilizar los posos del café o la cáscara de naranja para crear materiales innovadores con los que fabricar objetos tan cotidianos como tazas o lámparas. Ohmie es su último proyecto lanzado en Indiegogo que se cerró la semana pasada con una recaudación de 38.617€: una lámpara fabricada a partir de las cáscaras de naranja con una base biopolimérica. Un gran ejemplo de cómo transformar los recursos de la naturaleza en productos de diseño ecológico fabricados con un solo filamento de biomaterial en un movimiento continuo.
EL HORMIGÓN TAMBIÉN ES UN GRAN MATERIAL
"Durante muchos años, he estado obsesionado con el concepto de un degradado que refleja elegancia y armonía para mí," comenta el diseñador Philipp Aduatz. Una técnica que ha empleado en su último proyecto de impresión 3D en colaboración con el fabricante austriaco incremental3d. Se trata de una colección de bancos de distintos tamaños y un gran jarrón mediante la impresión en 3D de hormigón teñido.
ASEQUIBLE Y SOSTENIBLE
Batch.works nos presenta, junto con Plumen, cinco diseños de lámparas impresas en 3D. Estos modelos son fabricados bajo demanda con un filamento suministrado por la empresa social de Ámsterdam Reflow, que recicla y reutiliza los plásticos de botellas de agua y otras fuentes de contaminación plástica. En el catálogo de Batch.works encontrarás una gran variedad de diseños además de esta colección. Una selección que se imprimen in situ desde su sede del este de Londres, con el objetivo de fabricar productos asequibles y ecológicos que aprovechen al máximo la velocidad y la eficiencia de la impresión 3D.
PLÁSTICO RECICLADO DE VUELTA A TU CASA
La colección Strat cuenta con taburetes, sillones y mesas fabricados en menos de dos horas con plástico reciclado local. Inspirado en la economía circular, el diseñador Joachim Froment se ha propuesto devolver el plástico reciclado de Bélgica para volver a las casas en forma de muebles, una nueva forma de crear objetos sostenibles. El diseño sigue un patrón "modo jarrón" para imprimir de forma continua y sin interrupciones.
UN DISEÑO CON PREMIO
El proyecto Shapes of Sweden de Lilian Van Daal se desarrolló para el concurso anual para diseñadores Volvo Design Challenge, ganando la edición de 2015. Este diseño, inspirado en en las raíces de los árboles, cuenta con diferentes biomateriales como las fibras naturales de madera de pino, poco o nada comunes en los asientos de los coches, que suelen contar con materiales de espuma, metales y plásticos.
UN VERANO SOSTENIBLE
La empresa The New Raw ya nos proponía introducir en nuestras casas las redes de pesca abandonadas en el océano mediante objetos del día a día impresos en 3D con este material. Y ahora llega con su última colección pensada para la playa donde una hamaca, un cambiador y una pasarela, demuestran cómo se puede ser elegante y sostenible a partes iguales. Estos artículos están hechos a partir de desechos plásticos marinos reciclados, generando así un impacto ambiental y social positivo. La serie consta de tres productos con formas escultóricas consisten en superficies suaves y onduladas en dos tonos de color diferentes: Aqua y Sand (color azul y arena). De acuerdo con una filosofía donde la circularidad en la producción es clave, estos diseños son 100% reciclables para convertirse potencialmente en la materia prima de futuros productos. Este verano 2021, la serie se implementó en seis playas ubicadas en algunos de los lugares más famosos de Grecia utilizando 720 kg de residuos plásticos en total.
DISEÑOS DE ZAHA HADID CON SELLO ESPAÑOL
Hace unos años descubríamos el trabajo de Manuel Jiménez García, Miki Jiménez García e Ignacio Viguera Ochoa. El trío al frente de la firma abulense Nagami se alió con arquitectos, diseñadores y artistas de renombre internacional para imprimir en 3D sus creaciones. El material que da forma a estas dos sillas y a toda la colección es ácido poliláctico extruido (PLA), un plástico no tóxico y biodegradable procedente de fuentes renovables como el almidón de maíz, que destaca por su estabilidad y ligereza.
DISEÑO PROPIO Y PERSONALIZADO
La firma Signify ha creado un servicio de fabricación "a medida" de lámparas, con un configurador muy sencillo e intuitivo para que crees tu propia lámpara y luego la imprimen en 3D. Es hora de sacar tu yo más creativo.
Fuente: Elle Decor España
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