El concepto petfriendly ha trascendido la simple convivencia con animales para convertirse en una tendencia de diseño que integra a las mascotas como parte esencial del hogar. Cada vez más familias buscan que sus casas no solo sean funcionales y estéticamente atractivas, sino también cómodas y seguras para perros, gatos y otros compañeros de vida.
El diseño petfriendly parte de la elección de materiales resistentes y fáciles de limpiar, como pisos de cerámica, porcelanato o vinílicos, además de textiles lavables y duraderos que soporten el uso constante. Estos detalles permiten mantener la armonía visual sin renunciar a la practicidad.
Otro aspecto clave es la creación de espacios exclusivos para las mascotas, como camas integradas al mobiliario, comederos empotrados en cocinas o muebles, y rincones de juego diseñados de manera discreta para no interrumpir la estética del ambiente. De esta manera, la decoración no se ve afectada y la casa mantiene su estilo.
El diseño también se orienta a la seguridad y el confort bioclimático, garantizando ventilación adecuada, acceso a luz natural y elementos que eviten riesgos como bordes filosos o materiales tóxicos. Además, las terrazas y jardines se convierten en lugares ideales para la recreación, siempre que se adapten con cercos o barreras que protejan a los animales.
Más que una tendencia, el diseño petfriendly es un valor agregado en proyectos residenciales modernos, ya que responde a una necesidad real de los hogares contemporáneos: ofrecer ambientes donde el bienestar de las mascotas esté tan presente como el de sus dueños.