Ubicada en una tranquila calle sin salida cerca del parque Ibirapuera, en São Paulo, la Casa MA, diseñada por Rua 141 Arquitetura, reinterpreta el concepto de vivienda urbana moderna al combinar el estilo industrial con una conexión directa con la naturaleza.
El proyecto, liderado por la arquitecta Mona Singal, fue concebido para una pareja de triatletas que buscaba un hogar funcional, luminoso y acogedor, donde el deporte y la vida familiar pudieran convivir en armonía. En un terreno de solo 4 x 18 metros, la firma logró un resultado sorprendente: una casa de 135 m² distribuidos en tres niveles que aprovechan cada centímetro disponible.

El diseño se estructura en dos bloques conectados por pasarelas metálicas, articulando los espacios interiores con un jardín central donde un árbol de araça autóctono aporta frescura y bienestar. Este eje verde se convierte en el corazón de la vivienda, permitiendo ventilación cruzada y luz natural en todos los ambientes.
El estilo industrial domina la composición: vigas y columnas metálicas negras, muros de ladrillo pintados de blanco, instalaciones eléctricas aparentes y escaleras de chapa plegada conviven con detalles cálidos como los pisos de madera Tauari en espiga y los marcos de madera Freijó. Una estantería multifuncional de hormigón actúa como elemento integrador entre la sala, la cocina y el comedor, además de exhibir las bicicletas de la pareja como piezas escultóricas.



En la planta superior, la suite principal y los dormitorios infantiles se abren hacia el exterior mediante grandes ventanales y persianas venecianas, permitiendo disfrutar de las copas de los árboles. Finalmente, la azotea se convierte en un refugio urbano con una zona gourmet y una sala exterior rodeada de vegetación, un verdadero oasis que combina confort, privacidad y diseño contemporáneo.



La Casa MA refleja cómo la arquitectura puede transformar los desafíos del espacio reducido en oportunidades creativas, logrando una vivienda moderna, eficiente y emocionalmente conectada con su entorno.