En su más reciente intervención arquitectónica, el estudio 22RE, con sede en Los Ángeles, transforma un antiguo estudio del artista Ed Ruscha en un espacio de trabajo dinámico y residencial para la agencia creativa angelina Day Job. Ubicado en el barrio de Glassell Park, el edificio de 167 metros cuadrados se presenta con una fachada monolítica de abeto Douglas y estuco local, marcando una declaración sobria y contemporánea.
Al ingresar, los interiores revelan el sello distintivo de 22RE: equilibrio entre sobriedad y sorpresa, materialidad táctil y una narrativa espacial cuidadosamente orquestada. En el corazón del proyecto se ubica una plaza hundida, que actúa como eje central y punto de encuentro. Este gesto arquitectónico, además de resolver desafíos estructurales, evoca las plazas italianas y las geometrías lúdicas del modernismo soviético, iluminada por lucernarios circulares y enmarcada por columnas escultóricas que propician interacción y descanso.
El lenguaje material refuerza esta atmósfera cálida y expresiva: paneles de madera de cerezo contrastan con un suelo de hormigón verde, mientras encimeras de acero inoxidable, azulejos de cemento naranja y un salpicadero de cerámica Heath dan vida a la cocina. Elementos residenciales, como una isla de cocina, niveles de suelo diferenciados y asientos tipo lounge, integran la comodidad doméstica con la funcionalidad de un estudio vanguardista.
La distribución fluye con naturalidad entre zonas programáticas: además del espacio central de colaboración, el proyecto incluye una sala de conferencias privada con mobiliario a medida, una sala de edición, una cocina, un salón y dos aseos. Todo el mobiliario, diseñado por el propio estudio, reafirma la visión integral de 22RE, desde escritorios y mesas hasta sofás y piezas escultóricas.
La iluminación acompaña con una curaduría precisa: lámparas Pivotante à Poser de Nemo, Tekio en la plaza central, Fibonacci de Sophus en áreas de reunión y descanso, y apliques de Motoko Ishii que acentúan las columnas centrales, generando un ritmo visual armónico.
Con una paleta cálida y una sensibilidad californiana, Trabajo de oficina diurno representa una evolución en la trayectoria de 22RE: una apuesta por el color, la geometría y la materialidad que convierte la oficina en un espacio para pensar, conectar y crear con libertad.
Fotógrafo: Yoshihiro Makino




