El proyecto Casa MD fue una de las menciones honrosas de la categoría arquitectura presentadas durante el Premio Dossier. Por otro lado agradecemos a nuestros auspiciadores: Masisa y Cerámica San Lorenzo, es un honor que nos acompañen una edición más de Expodeco.
Cuando los arquitectos llegaron al terreno, encontraron que, entre los árboles antiguos y las piedras salpicadas, se hallaban las huellas del huayco que solía surcar esas tierras. La casa reconoce esas marcas al elevarse y dejar que atraviese sus volúmenes: desde la parte más alta del terreno, un canal de agua va recorriendo hacia abajo la casa, para terminar en una laguna al final del predio. Ese recorrido es imitado por el diseño de la casa.
La propuesta prioriza el contacto con la naturaleza. Se proyecta una construcción atemporal, coherente con el lugar en su elección de materiales y formas, y respetuosa tanto de su entorno inmediato como del medioambiente. Pero los trazos iniciales se inspiran en los restos arqueológicos de la zona: a ellos deben su consistencia los muros de piedra que arman y estructuran los espacios que conformarán la casa.
Se aprovecha la parte alta del terreno para colocar las construcciones importantes, privilegiando las vistas y propiciando el trabajo paisajístico en el resto del terreno. El ingreso, tanto peatonal como vehicular, está acompañado por vegetación y árboles frondosos, para generar sorpresa al llegar al edificio. Esta primera impresión se va abriendo y aclarando a medida que se desciende.
Los ambientes van de lo público a lo privado y de arriba hacia abajo. En el volumen social funcionan la sala, el comedor y la cocina en un espacio de mayor altura; al volumen privado se accede a través de un puente y una sala de estar de doble altura con estudio y biblioteca. La privacidad se logra gracias a un quiebre en los volúmenes, y la naturaleza como principal vista y la mayor protectora.
